En el mes del Día Mundial de la Enfermedad Inflamatoria Intestinal (EII), recordamos la importancia de concientizar sobre esta enfermedad que implica inflamación del sistema digestivo por tiempo prolongado1. En Chile estudios han descrito que está patología ha seguido aumentando, acercándose lentamente al nivel casos informados en los países desarrollados2, por lo que representa un nuevo desafío para la salud pública.
Los dos tipos principales de Enfermedad Inflamatoria Intestinal son la Colitis Ulcerosa y el Enfermedad de Crohn, estas dos afecciones tienen muchas similitudes y a veces son difíciles de distinguir entre sí. Sin embargo, hay varias diferencias. Por ejemplo, la enfermedad de Crohn afecta prácticamente a cualquier parte del tubo digestivo, mientras que la colitis ulcerosa casi siempre afecta solo al intestino grueso3. La Enfermedad Inflamatoria Intestinal también aumenta el riesgo de cáncer en las zonas afectadas del intestino3.
Ronald Vargas, Director Médico del Clúster Andino en Pfizer comenta "Es importante que las personas que sufren de estas enfermedades reciban un diagnóstico y tratamiento tempranos para controlar los síntomas y reducir el riesgo de complicaciones. Además, deben trabajar de cerca con su equipo médico para desarrollar un plan de tratamiento personalizado que incluya medicamentos y cambios en el estilo de vida".
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Enfermedad de Crohn:
Este tipo de enfermedad inflamatoria intestinal se caracteriza por la inflamación del recubrimiento del tracto digestivo, generalmente sus capas más profundas. La enfermedad de Crohn afecta con mayor frecuencia al intestino delgado, sin embargo, también puede afectar al intestino grueso y, en raras ocasiones, al tracto gastrointestinal superior1.
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Síntomas: Entre la sintomatología más común en personas con Enfermedad de Crohn está la diarrea crónica y dolor abdominal3. La enfermedad puede afectar otras partes del cuerpo, como articulaciones, ojos, boca, hígado, vesícula biliar y piel3.
Colitis Ulcerosa:
Esta afección causa inflamación y úlceras en el recubrimiento del intestino grueso (colon) y el recto1. La colitis ulcerativa tiende a ser hereditaria y puede ocurrir a cualquier edad, pero suele comenzar entre los 15 y los 30 años4.
Síntomas: Los síntomas más comunes son dolor abdominal y diarrea con sangre1. Otros síntomas pueden incluir anemia, cansancio severo, pérdida de peso y del apetito, hemorragia rectal, llagas en la piel, dolor en las articulaciones y hasta problemas de crecimiento en niños4.
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