No todos los viajeros pueden abordar un avión sin antes pasar por una evaluación médica. Esto es particularmente cierto para los pasajeros con enfermedades crónicas o aquellos que presentan síntomas de enfermedades infecciosas. Si un pasajero presenta alguna de las siguientes enfermedades, no se le permitirá viajar en avión:
1. Enfermedades respiratorias: Enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC), asma, enfermedad pulmonar intersticial, bronquitis crónica, neumonía y tuberculosis.
2. Enfermedades cardíacas: Insuficiencia cardíaca congestiva, arritmias cardíacas, enfermedad coronaria y enfermedad valvular.
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3. Enfermedades mentales: Depresión grave, trastorno bipolar y esquizofrenia.
4. Enfermedades infecciosas: Si un pasajero presenta síntomas de enfermedades infecciosas como el virus del Nilo Occidental, el virus del Zika, el virus de la gripe o el sarampión, no se le permitirá abordar el avión.
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5. Enfermedades digestivas: Enfermedad de Crohn, colitis ulcerosa, úlceras estomacales y enfermedad de reflujo gastroesofágico.
6. Enfermedades del sistema inmunológico: Enfermedad inflamatoria intestinal, enfermedad de la tiroides, lupus, artritis reumatoide y enfermedad de Sjögren.
7. Enfermedades del sistema nervioso central: Esclerosis múltiple, enfermedad de Parkinson y enfermedad de Alzheimer.
8. Enfermedades de la piel: Psoriasis, dermatitis atópica y eccema.
9. Enfermedades del oído, nariz y garganta: Otitis media, sinusitis crónica, amigdalitis crónica y enfermedades de la trompa de Eustaquio.
10. Enfermedades del ojo: Glaucoma, cataratas y degeneración macular.
Por lo tanto, si un pasajero presenta alguna de estas enfermedades, no podrá viajar en avión. Si no está seguro de si su enfermedad le impedirá abordar el avión, debe consultar con su médico antes de comprar un boleto de avión.